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Un niño de dos años se comió una almendra hace cinco meses y hoy no puede mover su cuerpo

noviembre 15, 2019

Fueron al hospital en diversas ocasiones, los médicos tardaron tres meses en descubrir que el niño tenía una almendra incrustada en el pulmón

Esta es una de esas historias que llaman la atención de todos los padres para que sean más conscientes de sus hijos pequeños.

David, un niño de dos años, comió un almendro hace 5 meses y, debido a un accidente con él, hoy se encuentra muy saludable.

Todo comenzó hace cinco meses. La fiesta de la Virgen del Remedio, Patrona de Petrés (Valencia, España), se celebraba en la casa de la familia Cruz Alba. Ese día había carne a la parrilla en el horno y otros platos que disfrutarían más tarde.

Fue en uno de esos actos que generalmente se ignoran cuando el pequeño David tomó una almendra que estaba entre las boquillas que se hicieron para la ocasión.

El niño se lo metió en la boca y, como siempre, se sentó en el sofá para ver los dibujos animados mientras los adultos continuaban su trabajo en la cocina.

Lo que sería el comienzo de una gran pesadilla comenzó a manifestarse una semana después, justo cuando David tenía una fiebre que alcanzaba los 40 ° C.

Sus padres lo llevaron inmediatamente al pediatra en el hospital del condado de Elda, a casi 182 km de distancia, y él les dijo que esto podría suceder porque le salían los dientes.

Los medicamentos recetados no redujeron la fiebre, y días después, el 18 de octubre, llevó al niño a la sala de emergencias por sospecha de neumonía.

Sin embargo, un par de días después se le envió de vuelta a casa porque los médicos no encontraron nada anormal.

El diagnóstico tardó…

Un día, tratando de encontrar una explicación, recordaron el episodio con la almendra y comenzaron a sospechar que podría tener algo que ver con eso.

Después de conocer este hecho, los médicos los enviaron al Hospital de Alicante el 11 de enero, donde lo mantuvieron en observación durante 4 días y luego se sometieron a una broncoscopia.

Se introdujo a David con un tubo flexible a través de la laringe para identificar y extraer la pieza de almendra que aparentemente estaba incrustada en el pulmón durante tres meses.

El problema apareció cuando el tubo extendió el pus que se había acumulado en el pulmón, lo que le ocasionó una parada cardíaca.

Los daños fueron severos…

12 días después de la complicación, David se despertó sin un pulmón infectado, pero con un daño neuronal grave debido a un paro cardíaco. Puede abrir los ojos, pero no ve.

Su cuerpo está quieto, no puede comer y tampoco puede hablar.

«Tenía el órgano podrido y la almendra hacía de tapón de la infección. Si hubiesen sabido desde el principio que la tenía allí, nada de esto hubiera pasado»

Los pediatras advierten que bajo ninguna circunstancia debería ser aconsejable dar a los niños menores de cinco años ningún tipo de fruta seca, ya que existe un alto riesgo de asfixia.

También señalan que alrededor del 80% de la asfixia en los niños tiene algo que ver con este tipo de alimentos.

Amparo y José Domingo no creen que sea un simple accidente y exigen justicia.

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