
Amanda Amaral, de 23 años, de Bahía, es un gran ejemplo a seguir. Aquí presentamos su hermosa historia de superación y cómo su trabajo ha estado mejorando su estilo de vida.

Amanda sufre de una enfermedad cutánea muy rara que no se puede curar, causando imperfecciones y pérdida de dientes.
Según ella, el trabajo es una de las formas en que encontró para superar la enfermedad y aceptar su condición física.

Más tarde, conoció a un chico del que se enamoró y la animó a hacer pasteles hermosos.